Durante las vacaciones tendemos a desentendernos totalmente de cualquier cosa que huela a trabajo y obligación, incurriendo a veces en la irresponsabilidad tecnológica
El 40% de los usuarios se despreocupa de la seguridad de sus dispositivos durante las vacaciones, según los estudios de Infosecurity Europe, la feria más importante en seguridad informática profesional a nivel europeo y que este año ha celebrado sus más de 23 años de difusión sobre ciberseguridad a principios de verano en Londres.
Los usuarios viajan con dispositivos de gran valor en los que guardan información personal. Sin embargo, una encuesta de ESET revela que en verano la seguridad no parece ser una preocupación para nadie.
De media, llevamos hasta 8 dispositivos como parte del equipaje
A pesar de que una cuarta parte de los usuarios de tecnología llevan en vacaciones junto al bañador y la sombrilla hasta ocho dispositivos informáticos en la maleta, valorados entre los 1800 y los 3600 euros, ha sorprendido ver que más de la mitad de esos dispositivos no están protegidos ni por contraseñas ni por patrones de seguridad.
El estudio, realizado entre 350 profesionales de la tecnología en toda Europa, arroja que el 31% de los encuestados no se preocupa por cuestiones de seguridad –protección ante ataques, robos o amenazas – a la hora de salir de vacaciones. Este dato es extensible a los propios profesionales de la tecnología, quienes “también bajan la guardia y su seguridad pasa a un segundo plano durante las vacaciones”, afirma Mark James, especialista de seguridad en ESET.
La seguridad informática se queda en un segundo plano en vacaciones
El que es especialista de la mayor empresa de seguridad informática con sede en la Unión Europea apela a la sensatez, alertando de las posibles consecuencias de tal relajación :“La gente debería ser más consciente del serio impacto que podría ocasionarles el hecho de que alguien husmeara sus aparatos y los datos y la información que encontrarían. El coste del dispositivo es una cosa, pero los datos, recuerdos e información que poseen es algo completamente distinto y que también tiene un alto valor».
En caso de robo o pérdida, habría que borrar los datos de forma remota. Los datos indican que pocos estaríamos preparados.
La dejadez sobre la seguridad contrasta con otra de las conclusiones del estudio: más de la mitad (el 55%) de los encuestados viaja con dispositivos de trabajo y, de éstos, hasta el 13% ha perdido alguna vez alguno de ellos –ya sea privado o corporativo– en verano. Cuando esto sucede, “hay que eliminar el contenido de los dispositivos móviles de forma remota”, añade Mark James.
Niños, adolescentes, y nosotros mismos tendemos a meternos en redes no seguras con tal de conectarnos a internet, sin darnos cuenta del peligro de esta irresponsabilidad tecnológica
“Mi consejo es que siempre se instalen soluciones de seguridad para evitar cualquiera de estas situaciones y mantener nuestros dispositivos móviles a salvo, incluso en vacaciones”, concluye.
Al margen del riesgo por irresponsabilidad tecnológica, relajar el control parental con nuestros hijos puede llevarnos un disgusto.
A mayor exposición, aumenta el riesgo de sexting, grooming y otras amenazas de internet como el ciberbullying que se produce en el entorno social del colegio y que se debe detectar a través de test especializados en acoso escolar.
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