En verano termina el acoso escolar pero puede darse ciberacoso
Patricia Peyró @kontrolparental
Acaba de terminar el curso escolar y es un momento de gran alegría para todos los niños. Para la mayoría de ellos, con el verano arranca la recompensa al esfuerzo de todo el año, y es el momento para desconectar y hacer cosas diferentes de forma relajada y sin exigencias. Para otros niños, sin embargo, las vacaciones no tienen el cariz del descanso y de la expectación de buenos momentos, sino que simplemente son un escape al sufrimiento por el bullying que han estado padeciendo a lo largo de los nueve meses del curso escolar.
A pesar del alivio que inicialmente pueda sentir el niño cuando asoman los casi tres meses de verano, paradójicamente, el bullying no coge vacaciones muchas veces, sino que permanece activo en forma de ciberbullying.
Los niños ven el verano como una forma de escapar al acoso escolar
El ciberbullying puede tomar el relevo durante el verano
El niño que padece bullying puede verlo cambiado durante el periodo estival, a su modalidad de ciberacoso, en los casos en los que este no se presentaba, o verlo potenciado en intensidad, si ya era víctima.
¿Cómo pueden controlarlo los padres? También en esta época del año los progenitores no debemos bajar la guardia y mantenernos atentos al estado anímico de nuestro hijo. Si notamos cambios en él, le vemos triste o angustiado y tendente a encerrarse en su cuarto, podría estar siendo víctima del ciberbullying.
Estos son las fuentes potenciales más frecuentes de ciberacoso:
-Redes sociales
De entre ellas, la investigación sugiere que Instagram es la más peligrosa y mayor fuente de acoso escolar. Si tu hijo tiene cuenta, revísala para asegurarte. Es más, repasa los siguientes hechos: ¿tiene edad para abrirse una cuenta? Recuerda que la edad permitida legalmente son los 16 años.
Debemos estar atentos a su conducta y estado de ánimo: si vemos que comprueba mucho su teléfono podría estar revisando la llegada de nuevos mensajes de acoso a través de las redes sociales o de WhatsApp
La edad media de adquisición de un teléfono móvil propio son los 8 años, y uno de los principales incentivos para tenerlo es, precisamente, el poder “textear” con sus amigos. Revisa si su Smartphone tiene demasiadas notificaciones o qué canales tiene abiertos en su WhatsApp. Recuerda que, a través de los grupos, es muy fácil aumentar el daño del acoso ya que la información puede llegar a un gran número de personas e incluso hacer virales algunos mensajes o imágenes sensibles.
El ciberbullying también tiene lugar en los vídeojuegos: el contacto con extraños propicia un acoso anónimo y en ocasiones de carácter sexual que puede incomodar y asustar al niño
Hoy son una de las mayores fuentes de diversión para los niños. Paradójicamente, pueden tener una intensa vida social a través de estos: aunque tú creas que está en su habitación solo jugando, el ha podido “quedar” con tres o cuatro amigos. Para ellos es, de hecho, una de las formas más fáciles para asegurarse contacto social (aunque sea virtual). Sin embargo, los videojuegos no son inocuos y permiten también el contacto con extraños. Es en estos últimos casos cuando se produce más a menudo el ciberbullying, generando situaciones incómodas para el niño y que lo pueden llegar a asustar. Lo que se conoce como “acoso anónimo” puede generar una gran inseguridad en ellos también.
¿Te ha gustado este artículo? Si es así, por favor, ayúdanos a compartir