Por Patricia Peyró @kontrolparental
El Grooming proviene del inglés y significa “acicalamiento”, porque hace referencia a cuidarse, fundamentalmente el cabello. Pero su significado cambia en el contexto de internet y constituye una de las grandes temáticas del control parental: la de proteger al menor del acecho de un adulto que tiene fines eróticos e ilícitos.
Esta forma de acoso se refiere al modo en que un adulto se aproxima a un niño usando las nuevas tecnologías para ganarse su confianza y abusar posteriormente de él. La motivación del acosador tiene un carácter claramente sexual, y busca la materialización, ya sea física o carnalmente, o ya sea sólo a través de la recopilación de material gráfico de pornografía infantil.
El grooming tiene una relación directa con el acoso sexual, entendiéndose éste por la relación en la que hay un abuso de poder, en este caso psicológico. ¿Cómo se pasa del grooming al acoso? Podríamos decir que el grooming es el primer estadío del acoso posterior, que podrá tener lugar una vez el depredador cuenta con alguna herramienta tangible, como pueda ser una fotografía, que le sirva para chantajear al niño.