A pesar de que viajamos cargados de tecnología, en verano relajamos la protección de nuestros dispositivos incurriendo en la irresponsabilidad tecnológica al descuidar las soluciones de seguridad.
Se debe ejercer el control parental también en el hogar, ya que no está libre de peligros para los niños cuando están metidos en internet. Los padres deben vigilar la actividad de sus hijos en la red comprobando si el contenido es adecuado para su edad, con quién se relacionan en las redes sociales o si están exponiendo sus datos de forma segura.
Los niños son especialmente vulnerables al abuso por internet y a sus amenazas: el acoso o ciberbullying, el sexting, el grooming, y el robo de datos son algunos de los peligros que entraña la red para el menor.
El phising es el término informático con el que se describe la suplantación de identidad o el robo de datos personales o robo de datos bancarios de forma fraudulenta y con fines criminales realizada por un phiser o ciberdelincuente.