El grooming es una forma de acoso sexual al menor en internet que se refiere al empleo de éste como vía de acercamiento para engatusar al niño con fines de abuso sexual, bien sea como forma para preparar un encuentro físico o para conseguir fotografías con las que después estimularse sexualmente o chantajear al menor.
Se debe ejercer el control parental también en el hogar, ya que no está libre de peligros para los niños cuando están metidos en internet. Los padres deben vigilar la actividad de sus hijos en la red comprobando si el contenido es adecuado para su edad, con quién se relacionan en las redes sociales o si están exponiendo sus datos de forma segura.
Los niños son especialmente vulnerables al abuso por internet y a sus amenazas: el acoso o ciberbullying, el sexting, el grooming, y el robo de datos son algunos de los peligros que entraña la red para el menor.
El niño bully es el niño hostigador o maltratador que abusa física y psicológicamente de otros niños de su edad, aprovechando su mayor fuerza física y mental, y agrupando otros niños que se unan al fenómeno del acoso, que se multiplica con el uso de internet y se convierte en ciberbullying. Los padres debemos identificar si nuestro hijo podría ser también un acosador.
Los selfies son autorretratos realizados con un dispositivo digital, generalmente móvil o Smartphone, que se hacen para comparti en redes sociales como Instagram, Twitter o Facebook. Las personas más adictas a los selfies son los adolescentes.
El phising es el término informático con el que se describe la suplantación de identidad o el robo de datos personales o robo de datos bancarios de forma fraudulenta y con fines criminales realizada por un phiser o ciberdelincuente.