Por Patricia Peyró @kontrolparental
Las redes sociales e internet se han introducido tanto en nuestras vidas que el niño de hoy ha dejado de dar la dirección de su casa para invitar al amiguito, a cambio de intecambiar sus números de móvil para mandarse whatsapps, tweets, y para socializar vía Facebook.
El uso de twitter por niños es controvertido, y tanto los partidarios de su uso infantil como los detractores tienen parte de razón:
– En general, la actitud crítica hacia twitter se basa en poner ciertas restricciones en su uso, que vienen a ser las mismas que para el empleo de internet en general: controlar el acceso a contenidos inadecuados, limitar el tiempo que pasan, y vigilar las relaciones sociales que entablan por esta vía.
– Otro de los argumentos esgrimidos es que la conversación en Twitter es adulta, incluso cuando los niños usuarios estén interactuando acerca de temáticas supuestamente inofensivas, ya que el cariz de las conversaciones puede cambiar o desviarse hacia temas y contenidos inapropiados para su edad, para los que carecerán de madurez y criterio para responder o reaccionar.
La corriente “pro-tecnológica” o “pro-twitter” defiende su uso como un recurso tecnológico más contra el que no se puede luchar, alegando además que se debe integrar dentro de la educación de las nuevas generaciones: estos niños han nacido con una tecnología que enriquecerá su aprendizaje con actitudes nuevas como la aplicación de la identidad y la responsabilidad digital.
¡El debate está servido!